La manzana es una fruta muy versátil que me gusta comer en todas sus versiones:  al natural, en postres, budines, muffins, tortas, al horno, en ensaladas…

Aquí les comparto una receta de compota que me encanta tener siempre fresca en la heladera para consumir durante la semana. Le va muy bien a unas tostadas, para acompañar un buen porridge en las mañanas, como complemento de panqueques, wafles, para agregar al yogur…

Con los ingredientes de esta preparación, obtendremos casi un frasco de mermelada.

Ingredientes:

• 3 manzanas orgánicas
• 3 cdas de azúcar mascabo (opcional)
• 1 ramita de canela
• 1 clavo de olor
• 1 cdta de jengibre en polvo
• 1/2 limón exprimido
• 1 taza de agua filtrada
• 6 dátiles

Procedimiento:

• Pelamos y troceamos las manzanas (les sacamos también el tronco interior) y las colocamos en una cacerola junto con el resto de los ingredientes, excepto los dátiles.
• Llevamos a fuego medio y cuando comiencen las burbujas, bajamos el fuego y lo dejamos cocinar de 10 a 15 minutos.
• Retiramos del fuego y dejamos enfriar.
• Sacamos el clavo de olor y la ramita de canela y llevamos la preparación al vaso de la licuadora o mini pimer. Agregamos los dátiles y procesamos hasta obtener una consistencia cremosa.
• Guardamos en un frasco hermético en la heladera, dura hasta 5 días.

¡A aprovechar las manzanas de temporada!